Hacia la digitalización de nuestras industrias
La transición digital de nuestras industrias es una fuerte palanca de crecimiento.
De hecho, el uso de herramientas digitales permite, entre otras cosas, optimizar las instalaciones y anticiparse a las limitaciones, así como a los acontecimientos.
Posicionándose como embajador de la Industria 4.0, podrá beneficiarse de las soluciones humanas y tecnológicas a los problemas industriales.
La Industria 4.0 se basa en 3 pilares fundamentales
Optimizar y anticipar nuestros procesos
La instalación de sensores y autómatas programables permite la instrumentación, la automatización y la generación de informes en tiempo real. La interpretación de esta masa de datos en bruto nos permite optimizar y anticipar nuestros procesos. Como uno de los objetivos de la Industria 4.0, la unificación de estos sistemas de información en una interfaz de supervisión o Hipervisión permite mejorar el rendimiento y tener un impacto transversal en todas las partes interesadas. La implantación de dispositivos robotizados / cobotizados permite a los empleados ganar en productividad y hacer más fiables los procesos de producción.
Para ir un paso más allá, la Industria 4.0 también aborda los retos de anticipación y mejora continua de las líneas de producción. La implantación de modelos
Los modelos algorítmicos e inteligentes permiten analizar e interpretar los datos brutos generados por las instalaciones y los sistemas. Este análisis inmediato permite anticipar y predecir restricciones futuras, así como simular eventos potencialmente arriesgados.
El uso de modelos inteligentes también permite actuar sobre una palanca de crecimiento empresarial, que es el control del rendimiento energético. Esta palanca de crecimiento propia de la Industria 4.0 permite a cualquier empresa controlar sus costes y su rendimiento. Frente a los retos medioambientales, la descarbonización de nuestras industrias se está produciendo a todas las escalas.